En estas fechas veraniegas, que es cuando realizamos más fotografía nocturna que en todo el año, es cuando más escucho en mis cursos y talleres frases del tipo «no subo el ISO más alto de 800, que mis fotos tienen ruido». ¿Por qué se le tiene pavor a utilizar un ISO alto cuando es necesario para realizar una determinada fotografía?
Cuando hablamos de ruido en fotografía digital nos referimos a esos puntos de diferentes tonos y colores de diferente intensidad repartidos en las fotografías cuando utilizados un ISO alto que degradan la calidad de imagen. Viene a ser, salvando las distancias, el equivalente al grano de la película.
En la era digital la evolución de la tecnología nos ha permitido poder ampliar al 100% o incluso más las fotografías que tomamos y en consecuencia poder ver todos los detalles -y defectos- de las mismas. Esto ha derivado en que se amplia las imágenes buscando el defecto, y cuando se busca el fallo, se encuentra siempre. De ahí la terrible obsesión de ver ruido digital cuando ampliamos al 100%.
¿Alguien se plantea si las fotografías de Ansel Adams, Robert Capa o de Henri Cartier-Bresson tienen grano (similar al ruido en película) si las miramos con detalle? ¿Cuando observamos un cuadro pintado nos acercamos tanto para ver si se notan los trazos del pincel y los «defectos» de la misma? Rotundamente no. Entonces, ¿por qué sí que lo hacemos con la fotografía digital? Ah, es que ahora podemos ampliar todo lo que queramos y antes no era tan fácil. Una fotografía, al igual que un cuadro, se mira en su conjunto y a una distancia mínima. Cuando se imprimen, cuanto más grande es la ampliación, a más distancia nos colocamos para verlas en su conjunto, como hacemos al observar una pintura. Está claro que mejor cuanto menos ruido, obvio. Pero nunca anteponer un ISO bajo por miedo a que pueda salir ruido cuando la fotografía lo necesita.
Por tanto, no tengáis miedo a subir el ISO tanto como sea necesario. Si una imagen tiene que tener ISO 6400 porque hay muy poca luz y necesitamos una velocidad mínima que nos permita realizarla a pulso o congelar el movimiento, tenemos dos opciones: que tengamos miedo al ruido y la velocidad sea tan lenta que la fotografía salga movida -y por tanto acabará borrada- o muy oscura -que sufrirá el mismo destino-, o aceptar esa pérdida de calidad (que a veces es muy pequeña) y tener una imagen no trepidada y por tanto válida. Además si disparas en RAW por software se puede quitar gran parte del mismo de forma muy fácil y con muy poca pérdida de calidad.
Podemos afirmar que en cualquier cámara réflex que tenga menos de 4 años se puede usar al menos ISO 3200 con muy buenos resultados y poca pérdida de calidad de imagen. Obviamente, dependerá del sensor que tenga nuestra cámara, pero en las APSC a 3200 ISO las imágenes son perfectamente utilizables y tienen una calidad más que aceptable y en Full Frame sube hasta ISO 6400 al menos, aumentando a ISO 12800 en las más recientes. Os lo prometemos. Para terminar de convencerte, realiza la prueba y resiste la tentación de verla al 100%.
En fotografía nocturna de paisaje si queremos sacar perfectamente definida la Vía Láctea, para tener las estrellas como puntos es necesario utilizar un ISO muy alto, como 6400 o 12800. Aun teniendo el diafragma totalmente abierto (por ejemplo a f2.8), tendremos que usar esas sensibilidades para que la velocidad no sea más alta de unos 20 segundos, ya que las estrellas empiezan a dejar de ser puntos para ser ya trazos y además las nebulosas y nubes de polvo que forman la Vía Láctea se empiezan a emborronar, dando un aspecto turbio y poco definido. Si, tendré ruido, pero lo puedes reducir en el revelado RAW y a cambio tendrás una fotografía impactante.
No saquemos la lupa para buscar el defecto, porque lo encontraremos seguro. Disfrutad más de la fotografía y no solo de la utópica perfección. Una fotografía poco interesante y mal encuadrada por muy poco ruido que tenga seguirá siendo una mala fotografía.